Pensar en Irlanda y que nuestras papilas gustativas reproduzcan el sabor de la maravillosa pinta de cerveza Guinness y nos trasladen a nuestro pub preferido es algo inevitable. Sin embargo, superada esta asociación de ideas, conviene descubrir algo más de lo que se esconde tras la verde y singular Irlanda
Ana Pérez Luna
19 de julio, 2018
Un artículo publicado en El Plural
La tercera isla europea de mayor tamaño es un país rebosante de cultura, historia y tradiciones. También es una destino repleto de buena música allá donde se mire. No es casual que uno de los iconos que identifican a Irlanda -junto al famoso trébol de tres hojas- sea el arpa.
Los irlandeses han sabido cuidar de su acústica a lo largo del tiempo y, aunque cada zona de la isla tiene un estilo particular, todos mantienen su ritmo tradicional y vibrante. La influencia en la música más actual, con la mezcla de toda una variedad de instrumentos que van desde la guitarra eléctrica a la flauta, pasando por el acordeón o la mandolina, han dado como resultado un país con referentes musicales como U2, Sinéad O’connor, The Corrs, The Cranberries, Enya y tantísimos otros.
La gente del lugar adora sus raíces y no es extraño que hasta nos topemos en algún pub con el propio himno nacional en directo, momento en que sin dudarlo deberás ponerte en pie y compartir emociones. De carácter acogedor, locuaz y amantes de la diversión, son perfectos anfitriones para deslizarnos por el maridaje resultante de la mezcla de sonidos y sabores de su tierra.
De la gastronomía irlandesa hay que probarlo prácticamente todo, la panceta con col, el pan de patata, la carne de cerdo, el estofado irlandés y los derivados lácteos como la mantequilla. ¡Por descontado, el marisco!
Hay que decir que sus caldos no se limitan a la sabrosa cerveza Guinness, durante nuestra estancia en este maravillosos país hay que probar el whisky irlandés, la sidra… y si nos decantamos más por los sabores dulces, un mítico café irlandés o una buena copa de crema Baileys son opciones perfectas.
Aquí va nuestra propuesta de ruta por las ciudades de Dublín, Cork, Limerick y Galway
Dublín
Para empezar, para los amantes de la cerveza, te recomendamos una visita al museo Guinness Storehouse. Allí, además de conocer la historia de esta mítica marca, descubrirás cómo elaborar una buena cerveza, con degustación incluida. También te recomendamos una visita al Against the Grain, un local donde podrás saborear toda la variedad de cerveza artesana que te permita el cuerpo, con embotellados muy originales.
Si eres más de un buen vino, sin duda alguna tendrás que visitar el bar Ely Wine un precioso y elegante local con una amplísima oferta enológica y una bodega bar en su interior.
Para combinar música y bebida visita el Sugar Club, en el centro de la ciudad, con estilos de lo más variopintos (rock, country, indie-folk… ), también encontrarás cabaret, comedia y hasta cine.
Cork
En la segunda ciudad más importante de Irlanda, Cork, también puedes degustar bien cerveza artesanal, bien de importación. Muy recomendable para ello es el Pub Franciscan Well Brewery. En su día, en este lugar existió un monasterio franciscano con aguas a las que se otorgaban poderes curativos… No sabemos si el alcohol que sirven en este local compartirá estas propiedades, pero por si acaso ¿por qué no probarlo?
Entre los mejores lugares en Cork para disfrutar de música en directo está el An Brog, encontrarás gente joven, mucho ambiente y actuaciones en directo de rock irlandés.
Y para disfrutar de una buena comida, el Ballymaloe House es un lugar ideal que además contempla una escuela de cocina de gran prestigio.
Limerick
En Limerick, una de las mejores opciones frecuentada por los turistas es el Dolans Pub, te seducirán los sonidos de violines, gaitas y acordeones de la tradicional música irlandesa en directo, y si lo prefieres también puedes optar por actuaciones cómicas en directo en otra zona reservada para ello.
En esta ciudad el lugar ideal para saborear todo tipo de alimentos es el Milk Market: panes, salchichas, morcilla, huevos, pescado, fruta o verdura fresca rematado todo con un delicioso chocolate… recomendamos pequeños bocados para poder probarlo todo, de lo contrario serás incapaz de continuar el día mínimamente activo.
Galway
En Galway, no puedes dejar de visitar el Bar The Crane, se trata de uno de los pubs más famosos de Irlanda. Es un precioso lugar de estética victoriana donde la música y la gastronomía más tradicionales del lugar están al servicio del cliente.
También te recomendamos el McDonagh’s Seafood House, con un exquisito marisco y pescado. Y si el bolsillo te lo permite puedes darte el lujo de comer en uno de los restaurantes de gran reconocimiento internacional ubicado en una antigua mansión aristocrática: el Cashel House.